Premio Nacional de Periodismo Simón Bolívar

Bocas de Cataca es uno de los tres pueblos palafíticos de la Ciénaga Grande de Santa Marta. Allí, en febrero de 2000, más de 50 paramilitares del bloque norte asesinaron a 11 pescadores. 1.200 pobladores huyeron aterrorizados; varios años después los antiguos habitantes comenzaron a retornar a sus ranchos. Sin embargo, ya los cauces de varios ríos habían desaparecido, quedando reducidos a potreros secos: una pesadilla más. Desde hace tiempo, la ciénaga viene desapareciendo, tal como lo narran los protagonistas en este pódcast. Desde el lugar de los hechos, este reportaje pone al descubierto, a partir de audios testimoniales, textos producto de una investigación juiciosa, efectos sonoros pertinentes y una acertada musicalización, la problemática de un hecho de actualidad preocupante: el desvío de los cauces de los ríos para irrigar cultivos de palma y arroz, sin importar el impacto ambiental y social en las comunidades ancestrales. Bocas de Cataca nació entre el agua y hoy muere de sed.

Cualquier trabajo periodístico sobre un conflicto armado debe contener también las llamadas pequeñas historias, es decir, esas voces y testimonios de quienes no tienen más opción que resignarse a vivir entre la azarosa y dura cotidianidad de la guerra. Y eso fue lo que hizo Carolay Morales en este reportaje donde pudo ver y escuchar cómo pobladores del Departamento de Arauca se han ido acostumbrando a trabajar y estudiar mientras suenan los tiros y reciben amenazas. Con destreza y cuidado, Carolay recogió y plasmó en este reportaje las vivencias e historias directas de una guerra que ya no parece conmover a nadie en Colombia.

Este reportaje dio a conocer al país los hechos ocurridos en la vereda Alto Remanso, en Puerto Leguízamo, Putumayo. Lo que empezó como un bazar campesino terminó en la mañana del 28 de marzo convertido en una tragedia provocada por una operación militar. El bazar se convirtió en un escenario de barbarie. La periodista Marcela Pulido y su equipo de producción emprendieron una travesía de 160 kilómetros por el Río Putumayo para reconstruir el minuto a minuto de lo sucedido. Con investigación y fuerza narrativa presentan el relato de un campesino sobreviviente y una joven indígena embarazada quien tiene un proyectil incrustado en su espalda. El reportaje fue oportuno, reveló graves denuncias sobre el operativo militar y aportó nuevos elementos para el análisis de la audiencia y las autoridades.

La Condena narra la historia de Jani Rita Silva, una lideresa ambiental que creó con su comunidad la Zona de Reserva Campesina Perla Amazónica en el bajo Putumayo, para la protección de la vida, el territorio, la biodiversidad y para el desarrollo de proyectos productivos. El periodista Santiago Wills habló largamente con la protagonista, con amigos, familiares y hasta con contradictores, documentando su nacimiento, su lenta y tortuosa educación por falta de recursos y su transformación en líder valiente y admirada. Este es un relato lleno de detalles que recrean el drama de Jani mientras lucha por sobrevivir a una lluvia de amenazas y atentados contra su vida por denunciar –apoyada por la Defensoría del Pueblo y la Contraloría– a una firma por el derrame de petróleo y vertimiento de desechos tóxicos al río Putumayo. Es un reportaje potente, compacto y honesto que se lee con admiración por el coraje de la protagonista y por la escritura aguda del autor.

Con tratamiento serio y riguroso, Juan Carlos Layton muestra la indignación de los habitantes del caserío La Felisa, Caldas, que permanecen incomunicados pues, a pesar de las promesas de rehabilitar la vía férrea, el Estado ha dejado la obra abandonada por años. Con testimonios que dejan ver la impotencia y hasta resignación, los pobladores comparten las experiencias de inseguridad ante robos y atracos que están viviendo a raíz de la presencia de los rieles abandonados en el sector próximo a sus viviendas. El desalojo también es amenaza que se cierne sobre toda la población próxima a la obra inconclusa. La investigación periodística presenta los antecedentes de la obra, aporta cifras concretas, contrasta la información proveída por las autoridades regionales y nacionales y presenta los escasos avances del Tren de Occidente, que podría devolver la esperanza a este caserío, Sin embargo, esto no se vislumbra en el corto plazo. La llegada del ferrocarril, por ahora, está lejana.